El método abn de cálculo

sábado, 22 de febrero de 2014

HOY 22 DE FEBRERO SE CUMPLE EL 75 ANIVERSARIO DE LA MUERTE DEL POETA ANDALUZ ANTONIO MACHADO.

Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
Caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace el camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino
sino estelas en la mar.

Antonio Machado (Sevilla, 26 de julio de 1875 – Colliure, Francia, 22 de febrero de 1939)

DÍA DE ANDALUCÍA: ORIGENES DEL ANDALUCISMO

1.648. Conspiración del Duque de Medina Sidonia.

1.835. Creación de la Junta Suprema de Andalucía de Andújar.

1.873. Se proclama la I República. Con Pi y Margall, federalista, se divide -mediante un proyecto- Andalucía en Andalucía la Alta y Andalucía la Baja.

1.833. Se divide Andalucía en ocho provincias.

1.883. Congreso Federal de Antequera. Se redacta la Constitución de Antequera.

1.918. Asamblea Andalucista de Ronda. Se aprueban el escudo y la bandera de Andalucía creadas por Blas Infante. El escudo es una copia del escudo de Cádiz, representa a Hércules ( cultura andaluza avanzada de Occidente) junto a las dos columnas (Monte Hacho y Gibraltar) y los dos leones (culturas primitivas); la bandera representa la bandera andalusí, el verde Omeya y el blanco Almohade, el blanco de la nieve y el verde olivo. Para Blas Infante las culturas tartesia y bética son las más avanzadas de Europa durante la Edad Antigua; Al- Andalus, en plena Edad Media, representa el Renacimiento y la Ciencia frente al oscurantismo y el feudalismo de Europa.

1.913. Blas Infante asiste al Congreso Georgista en Córdoba.

1.919. Asamblea Andalucista de Córdoba.

1.923. La Dictadura de Primo de Rivera trunca los sueños andalucistas y federalistas.

1.931. Se proclama la II República tras unas elecciones municipales. Blas Infante se presentará a las elecciones de 1.931 en las listas de una coalición andalucista y federal.
Se crea el primer himno de Andalucía.

1.933. Gana las elecciones la CEDA. Blas Infante crea junto al Maestro Castillo Díaz el himno de Andalucía (el que hoy es oficial).

1.936. Gana las elecciones el Frente Popular. Se aprueba el Estatuto de Autonomía para Andalucía. La bandera de Andalucía ondea por primera vez junto a la española en Sevilla. Blas Infante es elegido presidente de la futura Junta Regional de Andalucía.
Blas Infante es asesinado en la carretera de Carmona a Sevilla por los golpistas.

28 de febrero de 1.980. Elecciones para reconocer la Autonomía de Andalucía.

DÍA DE ANDALUCÍA. ORÍGENES DE ANDALUCÍA. POR BLAS INFANTE.

ORÍGENES DE ANDALUCÍA. POR BLAS INFANTE:
1. Tartesia

Andalucía abre para el mundo otra Edad, la del Bronce, de la cual ella es la inventora. Este pueblo descubrió el modo de endurecer el cobre por adición del estaño, transformándolo en bronce. Ambos metales los tenía su suelo. Ya en esta era Tartesia extrae y manufactura plata.
A esta época y a las anteriores pueden también referirse los reyes míticos andaluces: Hespero, Gárgoris, Occéano, Sol, Gerión, Noraz y Habidis.

Tartesia no era un pueblo guerrero. Era un pueblo de pacífico de navegantes, comerciantes y colonizadores. Habidis dio libertad a los esclavos prohibiendo el servilismo del pueblo.

Platón, hablando de los atlántidas, recoge las noticias míticas de los antiguos tirios y asegura que gozaban de perfecto estado.

Todo el mundo conoce el célebre pasaje de Strabón, a quien aseguraban los tartesios que sus leyes escritas databan de 6.000 años.

La población Tartesia, antes y después de los tirios, debió ofrecer , sobre todo en la capital, un aspecto cosmopolita. En los tiempo primeros, etíopes, libios, egipcios, mediterráneos y gente oriental. Más adelante, tirios, judíos, sirios, asirios, pero sobre todo judíos.

Fueron un pueblo enteramente antiguerrero, entergado por completo, a las artes de la paz... Esta fue la causa de que constituyendo el único fenómeno político de Iberia no llegase a realizar la unidad peninsular.

Los tartesios sometieron a los tirios, que no eran precisamente unos héroes; más tarde tiene que que tomar mercenarios celtibéricos para defenderse, no sabiendo resistir ni a los cartagineses ni a los romanos.

La índole pacífica de los tartesios ofrece un aspecto muy loable y simpático en la cordial hospitalidad con que reciben al extranjero. Estrabón subraya este lado pausible del carácter andaluz. Arenas, con respecto a la emigración hebrea subraya varios textos bíblicos demostrativos de que Andalucía era la “Argentina” de los emigrantes judíos. A los tirios les permiten establecer colonias. Más tarde, invitan a los focenses a establecerse allí y les apoyaron y ayudaron de todas las maneras. Mientras los fenicios ocultan el camino del estaño y del ámbar los tartesios explican a los focenses cómo hacían el viaje a Oestrysunis a buscar estos productos.

Hasta los judíos perseguidos por la justicia o el hambre de su país, como Jonás, piensan en Tartesos.

Entre los dioses tartesios no existe, pues, combate y la contradicción continua que hay entre los dioses posteriores del Olimpo griego. Tartesia, pueblo antibélico, proyecta su pacifismo al cielo de sus deidades. Pero aquí sólo nacen dos dioses de los griegos: Hermes, hijo de Erithea, dios del pacífico comercio, y su abuelo Glaucos (Gerión), rubio dios de los mares tranquilos y soleados, el que calma las ondas revueltas por las tempestades.

Otro dios principal de Tartesia era el Sol. En la serie de monarcas míticos aparece como el primer rey de Andalucía.
El culto al Sol resiste en Andalucía a todos los tiempos. En cualquier expresión artística, árabe o cristiana, por ejemplo, aparece siempre el sol reproducido.

Afrodita y Hera tenían inmensos santuarios y, como en Grecia, la primera innumerables nombres.

2. La Bética: potencia cultural.

Roma trató a Andalucía de potencia a potencia. Pues bien, la España bética, con sus colonias patricias,municipios, ciudades libres y federadas y ciudades de fuero latino, es culturalmente, frente a Roma, una potencia de rango análogo. Los romanos lo consideraban así.

Andalucía era una potencia cultural y libre y al fundirse con Roma ayudando a ésta a prosperar en su contradicción contra los demás pueblos peninsulares, Lusitania y Celtiberia, defendía en contra de éstos su libertad y su rango de potencia cultural.
Roma encontró en ella una cultura afín a la que ella propagaba. Al pueblo que la sustentaba no pudo, por consiguiente, incluirle en el concepto de barbarie y lo reconoció mediante hechos expresos como una extensión metropolitana cultural, o como un capaz reino extranjero.

La cultura bética es la misma tartesia continuando su desarrollo con distinto nombre y con nuevos instrumentos. Sigue viviendo Tartesia.

Este es el sino de Andalucía enfrente de los pueblos guerreros. Lucano lo dijo bellamente: “Siempre fuimos de Marte el adverso, presa infeliz. Igual número tuvimos de derrotas que de guerras”.

3. Al Ándalus: Primer Renacimiento en Europa (Edad Media).

Andalucía fue siempre un pueblo cultural, creador de las culturas más intensas y originales de Occidente. Fue siempre un pueblo antibélico y acogedor. En su territorio, siempre que fue libre (la última vez durante la época musulmana), se operaron las grandes síntesis, prácticas o industriales, y doctrinales y científicas de Europa. Esta vocación sintética respondía acaso, al acogimiento y libertad de convivencia social, que en su solar tuvieron las razas más opuestas, africanas, orientales y europeas, desde los más lejanos tiempos de su historia. Últimamente, en Al-Ándalus, convivían perfectamente dentro de nuestra sociedad varias razas y religiones: bereberes, árabes, gallegos, catalanes, eslavos o centro europeos, y las tres grandes religiones de carácter universal: el judaísmo, el cristianismo y el islamismo; además de innumerables heterodoxias. Andalucía es por sí, para España y la Humanidad. En Andalucía no hay extranjeros. El libre cambio como regla en contradicción con los nacionalismos proteccionistas son las nuevas palabras que vienen a traducir la aspiración constante de un pueblo universalista, comerciante y marítimo o navegante.
La tierra de Andalucía para el jornalero andaluz es precisamente un imperativo que actualmente viene a contener la vindicación esencial de un pueblo privado de su tierra por la conquista cristiana o Europea; de un pueblo cuyo genio es extraño al feudalismo medieval.
Andalucía, que no es Europa, que es África y Europa (la Penibética formaba con África una unidad hasta el Atlas: esa unidad natural no se ha roto).
Blas Infante: “Andalucía, Teoría y Fundamento Político”.

LA EDUCACIÓN PROHIBIDA, DOCUMENTAL

jueves, 20 de febrero de 2014

DÍA DE ANDALUCÍA, UN POCO DE HISTORIA. LA CONSTITUCIÓN DE ANTEQUERA

La Constitución de Antequera de 1883: horizontes para un país.
El proyecto establecía adelantos democráticos y logros sociales verdaderamente avanzados para la época, desde el feminismo a la igualdad social.

Por RUBÉN PÉREZ TRUJILLANO

Lo primero que llama la atención de la Constitución de Antequera es su arquitectura, tanto desde un punto de vista formal como material. No es para menos: convergen las ideas de Proudhon, el contractualismo sinalagmático de Pi y Margall, el socialismo utópico (sobre todo Fourier), el liberalismo social y el primer feminismo. En este cruce de caminos surge el andalucismo político.
La Constitución está compuesta por tres proyectos de confederación que, articulados mediante cuatro apéndices, estaban destinados al municipio, el cantón y la Federación Andaluza o Estado de Andalucía.
Al mismo tiempo, la Constitución encarna el pacto social entre individuos, clases y pueblos. Es un instrumento pacífico para la transformación, que aspira a romper la unidad del poder, repartir la tierra desamortizada entre los campesinos y cambiar la unidad nacional por la unión libre. Estamos ante un proyecto constitucional sui generis, verdadera joya jurídica y sin parangón en la historia del constitucionalismo.
En los textos de 1883 se sostiene solemnemente que el pueblo andaluz tiene su nación. Ante todo, es una comunidad de recursos producidos colectivamente y puestos a disposición de personas iguales. Una comunidad, también, de cultura (generalización de la educación pública y gratuita, revitalizadora de las memorias colectivas de cada pueblo ibérico), solidaria (el asistencialismo redentor como fuente de legitimidad), de sufrimiento (el drama del jornalero, la proletarización y el hambre como telones de fondo) y de lucha (incardinada en el proceso revolucionario democrático). Una comunidad, en suma, basada en el reparto.
Ahora bien, no es la primera vez que prende la idea de afirmar política y constitucionalmente la unidad del pueblo andaluz. A pesar de lo que se dice, ya antes de la Constitución de Antequera tenemos algunos ejemplos, como cierto proyecto hasta hoy inédito, el de Constitución federal español publicado por Flamilso en la vorágine del Sexenio (1869), o los proyectos constitucionales del revolucionario andaluz Roque Barcia (1870), dirigente del Cantón de Cartagena.

miércoles, 19 de febrero de 2014

HIMNO DE ANDALUCÍA


PRIMER HIMNO DE ANDALUCÍA

SOBRE EL DÍA DE ANDALUCÍA

SOBRE EL DÍA DE ANDALUCÍA EN LOS COLEGIOS

Por César Alfonso Viñas.

La semana que viene se celebra en todos los centros educativos de nuestra Comunidad Autónoma la Semana Cultural Andaluza así como el Día de Andalucía (28 de febrero).
Al margen de los bailes típicos andaluces, que tienen un indudable valor pedagógico y lúdico para el alumnado, así como un valor folclórico y antropológico indiscutible procedente de nuestra cultura popular, este debería ser también un día de reflexión, estudio y fomento del pensamiento crítico acerca de lo que significa ser andaluz y sobre la desconocida figura de Blas Infante.
Fue Blas Infante un hombre culto estudioso de las culturas y la Historia de Andalucía (Tartessos, la Bética y Al-Andalus); un defensor de la Democracia y del Federalismo y los movimientos anarquistas de los jornaleros en el campo que pasaron hambrunas y penurias en los latifundios andaluces de carácter feudal. Blas Infante, que nació muy cerca de Línea, en Casares, no era el andaluz jactancioso, gracioso, mueble, chistoso,... Tampoco lo fueron otros grandes intelectuales andaluces como el rondeño y pedagogo Francisco Giner de los Ríos que fundó la Institución Libre de Enseñanza en una época de oscurantismo en España cuya pedagogía continua hoy más viva que nunca en el prestigioso Colegio Madrid de México fundado por exiliados españoles de la Guerra Civil; la malagueña María Zambrano, influenciada por los pensamientos vitalistas, existencialistas y del ser de Heidegger, Nietzsche y Ortega y Gasset entre otros cuyas obras maestras de esta pensadora son De la Aurora y Claros del Bosque; los poetas Don Antonio Machado, Federico García Lorca, Rafael Alberti, Luis Cernuda y Juan Ramón Jiménez que representan lo más alto de la poesía universal escrita en castellano.
Blas Infante estuvo a punto de ser asesinado durante la dictadura de Primo de Rivera y, posteriormente, tras las elecciones de 1936, con la victoria del Frente Popular, el movimiento andalucista recobró fuerzas. Durante la Asamblea de Sevilla celebrada el 5 de julio de 1936 se aclamó a Blas Infante como presidente de honor de la futura Junta Regional de Andalucía. A los pocos días, se produjo el golpe militar que inició la Guerra Civil Española. Varios falangistas le detuvieron en su casa de Coria del Río y fue fusilado por aquellos que no toleran ni la Libertad ni la Democracia, sin juicio ni sentencia, junto a otros dos detenidos el 11 de agosto, en el kilómetro 4 de la carretera de Sevilla a Carmona. Cuatro años más tarde el Tribunal de Responsabilidades Políticas, creado después de la guerra, le condenó a muerte y a sus herederos a una multa económica, según el documento de 4 de mayo de 1940 escrito en Sevilla:
[...] porque formó parte de una candidatura de tendencia revolucionaria en las elecciones de 1931 y en los años sucesivos hasta 1936 se significó como propagandista de un partido andalucista o regionalista andaluz.

El Día 25 de febrero el alumnado cantará el Himno de Andalucía junto a la bandera y serán muchos los alumnos y alumnas así como profesores que se preguntarán qué significa el himno.
Para Blas Infante la cultura andaluza y el origen de Andalucía provienen de tres culturas directoras y avanzadas: Tartessos, la Bética y Al-Andalus.
Para el estudio de Tartessos se basó en los trabajos del arqueólogo e hispanista alemán Adolf Schulten. Esta avanzada cultura, identificada por muchos historiadores con la mítica Atlántida que describió Platón en su obra La República, viene recogida en la letra del Himno que el propio Infante creó: “Los andaluces queremos volver a ser lo que fuimos hombres de luz, que a los hombres, alma de hombres les dimos”. La imagen de Hércules o Heracles en el escudo junto a las dos columnas (Gibraltar y Monte Hacho) y los dos leones, aparte de querer mostrar un origen antiguo de Andalucía que se difumina en lo mítico , representa al hombre y a la mujer de Tartessos más evolucionados y enseñando a otras culturas primitivas ancladas en el Neolítico (los leones).
Para Blas Infante la Bética romana fue una importante cultura que provenía de Tartessos. Los romanos trataron a la Bética de potencia a potencia y no les dieron la catalogación de cultura bárbara. Para Infante, Al Andalus representaba en plena Edad Media el Renacimiento mientras que el resto de Europa vivía en las cavernas, el oscurantismo y el feudalismo.
Eso es lo que quiere decir “los andaluces queremos volver a ser lo que fuimos”.
También la letra del himno invita a los campesinos a luchar por tener y cultivar sus propias tierras.
Andalucía ha sido la descubridora de América; Andalucía ha sido la cuna del liberalismo en España de donde han partido importantes revoluciones liberales del siglo XIX y campesinas bolcheviques y libertarias de principios de siglo XX contra la tiranía de Fernando VII, la corrupción de Isabel II y posteriormente la dictadura de Primo de Rivera: Riego (Cabezas de San Juan) , Torrijos (Málaga), Prim (Gibraltar y Cádiz), la revolución de Loja, la Gloriosa de 1.868,...
En Andalucía, en concreto Cádiz, se redactó y se votó la primera Constitución liberal de España en 1.812. Mucha gente murió y se exilió a Inglaterra por defender esta Constitución frente al tirano Fernando VII.
Ser andaluz en la desmemoria es peligroso. Podemos estar condenados a repetir la Historia si no se forma adecuadamente al alumnado desde la Escuela Pública y el pensamiento crítico, pues eso debe ser la escuela pública un agente de cambio y de transformación social y no un agente de inmovilismo, de perpetuación la estructura del sistema y las viejas tradiciones. Ya lo dijo Roger Waters, el bajista del grupo Pink Floyd, en la canción El muro: “maestro, tú solamente eres un ladrillo más en el muro”.